Cuba rechazó en la Cumbre de la CELAC la política injerencista de EE.UU. y la OEA

Durante su intervención en la VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), el presidente de Cuba rechazó la injerencia de Estados Unidos y a su instrumento; la Organización de Estados Americanos (OEA) en la región de América Latina y el Caribe.

El mandatario cubano celebró la «alegría se completa y honra con la plena reincorporación de Brasil por decisión del querido Lula». Además, expresó «todo el respaldo y solidaridad ante los actos violentos y antidemocráticos que pretendieron generar caos e irrespetar la voluntad mayoritaria del pueblo brasileño», el pasado 8 de enero.

Díaz-Canel fustigó la política injerencista de Estados Unidos, el cual «persiste el empeño de dividirnos, estigmatizarnos y subordinarnos a sus intereses, a casi 200 años de promulgarse la Doctrina Monroe».

Y citó, en ese sentido la reciente llamada Cumbre de las Américas «realizada en Los Ángeles, donde abusando de su poder de anfitrión y cerrando ojos y oídos al reclamo de la mayoría, excluyó, fracturó, ignoró».

Cuba rechazó en la Cumbre de la CELAC la política injerencista de EE.UU. y la OEA

Sin embargo, destacó el jefe de Estado cubano, «la testaruda realidad será siempre más fuerte que cualquier intento de dividirnos; porque compartimos retos derivados de un orden internacional injusto, expoliador y antidemocrático». Y además, recordó que la región es «todavía la más desigual del planeta».

Asimismo, Díaz-Canel confirmó que Cuba apoya «como un proyecto interesante y útil» la idea de constituir la Agencia Latinoamericana de Medicamentos.

Denunció, por otra parte, que «Estados Unidos insiste en destruir el modelo de desarrollo que soberanamente hemos decidido construir los cubanos; mediante una política cruel, ilegítima, ilegal e inmoral de asfixia económica». También rechazó la inclusión de Cuba en la lista de Estados que supuestamente patrocinan el terrorismo.

En la declaración central de su intervención, el mandatario cubano ratificó que La Habana y su Gobierno «no reconocemos, ni reconoceremos autoridad alguna a la OEA, que es la organización que al servicio de Estados Unidos apoyó; quien apoya intervenciones militares, golpes de Estado y la injerencia en América Latina y el Caribe contra gobiernos populares y legítimos.

De la misma manera, aseguró que «La OEA es la organización que no hizo nada contra los asesinatos, las torturas, las desapariciones forzosas y la persecución de líderes sociales, progresistas y de izquierda de la región; que permanecerán por siempre en nuestra memoria».

Auguró éxitos para la gestión de San Vicente y las Granadinas al frente de la Celac para este año 2023; a quien dijo que acompañará en su condición de presidente del Grupo de los 77.

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