El jugo natural con efecto laxante que ayuda a expulsar las heces acumuladas
Retorcerse con dificultad al momento de ir al baño por no poder evacuar las heces del intestino es una de las señales que indican que una persona puede estar padeciendo de estreñimiento crónico. Se trata de una afección que se caracteriza por las deposiciones poco frecuentes o la dificultad para evacuar, lo que se manifiesta durante varias semanas o más. Es un signo habitual de muchos problemas digestivos.
La entidad especializada en salud Mayo Clinic asegura que aunque el estreñimiento ocasional es muy común, algunas personas experimentan estreñimiento crónico que puede interferir en su capacidad de realizar sus tareas diarias.
Este también puede provocar que las personas hagan demasiada fuerza para defecar. De esta manera, este padecimiento significa que una persona tiene tres o menos evacuaciones en una semana. Además, las heces pueden ser duras y secas y en algunos casos puede causar dolor.
Para prevenir este padecimiento, es clave una dieta rica en vitaminas y minerales que funcionen como laxantes naturales para poder evacuar las heces acumuladas en el intestino. El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos asegura que las personas deben consumir suficiente fibra y tomar mucho líquido para ayudar a que la fibra funcione mejor.
El consumo de jugos naturales para lograr beneficios en la salud se sigue abriendo paso con más regularidad en la dieta de miles de personas que han encontrado en ellos una buena alternativa para superar algunas situaciones que afectan el organismo.
No obstante, el portal Mejor con salud ha señalado que se ha determinado que la eficacia de los jugos oscila entre leve y moderada, tras advertir que “no son una receta mágica al momento de eliminar o prevenir incomodidades de este tipo y, de acuerdo con la salud de quien los bebe, se requieren ciertas consideraciones”.
Estimó que no constituyen una solución por sí solos, por lo que, además de mantener un estilo de vida saludable, basado en buenos hábitos, se debe consultar al médico en caso de alguna inquietud, especialmente cuando una persona sufre de alguna enfermedad intestinal o de diabetes, ya que algunas de esas bebidas contienen un alto índice glucémico.
Jugo de papaya y naranja
Estas dos frutas son ricas en agua y fibra, por lo que ayudan al funcionamiento intestinal, además de hidratar. Para disfrutar de sus beneficios, según el portal Adelgazar en casa, se agrega a la licuadora una rebanada de papaya, previamente lavada, cortada en trozos y sin semillas y se incorpora una taza de jugo de naranja fresco y tres ciruelas pasas. Se mezclan todos los ingredientes y la bebida estará lista para consumir de manera inmediata.
Otras opciones de jugos naturales
Jugo de pera y semillas de lino
Este es uno de los jugos con propiedades laxantes más fáciles de elaborar. Tanto la pera como las semillas de lino contienen fibra dietética, la cual resulta determinante para controlar el estreñimiento.
Según lo detalla un estudio publicado en World Journal of Gastroenterology, la fibra puede aumentar la frecuencia de las heces en pacientes con estreñimiento. Por eso, se sugiere su consumo para prevenir y tratar esta condición.
Ingredientes:
2 peras
1 cucharada de semillas de lino (10 g)
½ vaso de agua (100 ml)
Modo de preparación:
Trocear las peras sin retirarles la cáscara y, después, mezclarlas en la licuadora con la cucharada de semillas de lino y el medio vaso de agua.
Tras obtener un jugo homogéneo, consumirlo en ayunas y tomarlo tres veces a la semana para aliviar el estreñimiento.
Jugo de kiwi y naranja
Un estudio publicado en Asia Pacific Journal of Clinical Nutrition determinó que el consumo constante de kiwi acorta el tiempo de tránsito del colon, aumenta la frecuencia de defecación y mejora la función intestinal, sobre todo en pacientes con síndrome del intestino irritable y estreñimiento.
Ingredientes:
5 naranjas
4 kiwis
Modo de preparación:
Extraer el jugo de las cinco naranjas.
Mezclarlo en la licuadora con los kiwis pelados y cortados en varios trozos.
Asegurarse de batirlo lo suficiente para que no queden grumos.
Servirlo sin colar y consumirlo en el menor tiempo posible, para que no se pierdan sus propiedades
Tomarlo en ayunas y esperar como mínimo 30 minutos para desayunar.